Diciembre es la fecha límite que establece la nueva Ley de Vivienda para que vea la luz el nuevo índice de referencia con el que se actualizarán los alquileres a partir de 2025.
El Gobierno designó al Instituto Nacional de Estadística (INE) como órgano encargado de elaborar este nuevo índice, y el mismo INE ha informado recientemente que apurará hasta el último momento, es decir hasta diciembre, para presentar el nuevo indicador y su funcionamiento.
De este nuevo índice ha transcendido muy poca información. No hay detalles sobre qué parámetros utilizará o cómo se actualizará. Tampoco se sabe cómo está funcionando y avanzando el grupo de trabajo que lo está elaborando. Lo que sí se prevé, pues era su objetivo inicial, es que el nuevo indicador sea más estable y más bajo que el actual índice al que están referenciados la mayoría de los contratos de alquiler tradicional en España, que no es otro que el Índice de Precios al Consumo (IPC).
Por qué este nuevo índice
En mayo de 2023 se aprobó la Ley de Vivienda, la cual contemplaba la puesta en marcha de un nuevo indicador que tratara de contener la subida desproporcionada de las rentas de alquiler.
Según la ley, ‘el Instituto Nacional de Estadística definirá, antes del 31 de diciembre de 2024, un índice de referencia para la actualización anual de los contratos de arrendamiento de vivienda que se fijará como límite de referencia a los efectos del artículo 18 de esta ley, con el objeto de evitar incrementos desproporcionados en la renta de los contratos de arrendamiento’.
Así pues, el INE se lo ha tomado al pie de la letra y esperará hasta el último momento para presentar el nuevo índice, que entrará en vigor en 2025.
Cómo se actualizan ahora los alquileres
En los alquileres que se renuevan en 2024, y los cuales tengan pactada una actualización anual de la renta, dicha actualización no puede superar un incremento del 3%. Este incremento está referenciado al Índice de Garantía de Competitividad (IGC). En 2022 y 2023 las subidas anuales se limitaron al 2%. El Gobierno decidió estos porcentajes ya que, tras el inicio de la guerra en Ucrania, el IPC se disparó, llegando a superar el 10%.
Por otro lado, hay que destacar que este nuevo índice, así como los incrementos controlados de 2022, 2023 y 2024 se aplican a todo tipo de alquileres de vivienda tradicional (regidos por la LAU), e independientemente de si el propietario de la vivienda es o no un gran tenedor.
A qué contratos afectará
Lo que no queda claro es si el nuevo índice afectará a todos los contratos activos o a aquellos firmados desde la aprobación de la nueva Ley de Vivienda. Inicialmente, los contratos anteriores a mayo de 2023 (es decir, anteriores a la Ley de Vivienda) seguirán referenciados al IPC hasta que el contrato finalice, mientras que los contratos del alquiler firmados desde la aprobación de la nueva Ley (mayo de 2023) pasarán a regirse por este índice.